jueves, 8 de abril de 2010

Cuerpo a cuerpo

Fotografía realizada por Borja Arnáiz

(La nieve caía
y entre los copos,
a ti te veía)

Esperma del cielo eran los copos,
los brazos abiertos recibiendo consejo
y abajo, en la tierra, un manto de hielo
hacía esperanzas en el mar del consuelo,
los dedos, con frío, aplaudían
el polvo de la melancolía.

Pasa la mañana, diurna de penas,
haciendo antesala a la tarde serena,
remanso de paz cuando acaricio tus piernas
y beso tus labios en letanía eterna,
se subyuga mi carne cuando la tuya está cerca
y calienta mi cuerpo en días de ausencia.

Me gustas sereno, te amo en la pena,
te quiero en la dicha y también en la guerra,
pero deseo con fuerza la paz en tu arena,
los tigres del miedo, huyendo de ella,
venciendo en la lucha de la vida ,
cuerpo a cuerpo, reja a reja, clavando la espada.

Quisiera morir en tardes como ésta
para llevar de sudario, como una ambrosía
el tacto de tu piel, sobre el alma mía.




domingo, 4 de abril de 2010

Frutas de invierno


Endulzo un zumo,
utilizo sacarina,
me engaño a mi misma.



Llenan mi nevera las frutas de invierno,
mientras en frío aparece en éste otoño,
el zumo de cítricos se derrama
sobre un folio de color anaranjado,
se confunden los colores,
apenas una imperceptible humedad
acartona, al secarse, el papel
y las letras en él escritas.
Transcribo las palabras que recuerdo,
y estrujo con furia un par de naranjas,
bebo despacio, el líquido y mis penas.
Escribo éstos versos recordando los tuyos
y los momentos vividos,
a veces un instante,
un beso rápido de despedida,
o un encuentro apasionado
entre abrazos y caricias,
un llanto, una cena, una alegría…
Cubro mis hombros con un chal,
para aliviar el frescor de mi cuerpo,
tomo un somnífero y me acuesto
para olvidar las penas
y soñar con otro encuentro.