martes, 15 de junio de 2010

¡Ay los hijos!


Siente un año que te abraza
en la madurez de tu alma,
mientras la vida transcurre
bébela a bocanadas,
que el aire que no respires
negará a otras personas
esas palabras no dichas
almacenadas con calma
en sosegante reposo
en la noche de la nada,
cuando se acunan los versos
a ritmo de tierna nana
recordando otros ayeres
cuando los hijos llamaban
reclamando fresca leche
o mirando tus miradas.
Hijos nacidos al mundo
que abandonan la posada,
refugiándose en los besos
de blanca paloma alada,
intentando hacer el nido
donde refugiar el ansia
de las jóvenes caricias
que envejecen con las canas.
Lirios, que un día supieron
alimentar ésas ansias
cuando mecías su cuna
blandiendo gran esperanza.
¡Déjalos, que corran solos!
ya volverán si se cansan,
con cariño abre la puerta
recoge sus esperanzas,
tiende gustoso los brazos,
no esperes ni una alabanza,
que los hijos son así,
pero si vuelven a casa,
que encuentren siempre a sus padres
para apoyarse en sus almas.

2 comentarios:

  1. Veo que has cambiado la imagen de tu blog, muy bonito.
    Muchos besos
    Ana

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  2. hola como estas queria felicitarte por tu blog ns vemos y te deseo la mejor de tus surte

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